Documenta minima

E. M. CIORAN, Cuaderno de Talamanca. Ibiza (31 de julio-25 de agosto de 1966), Pre-Textos, Valencia, 2002, 64 páginas.

**********

Es en los paisajes demasiado hermosos en los que uno siente con más fuerza toda su podredumbre y lamenta el cadáver que arrastra consigo.

***

Ganamos en conciencia lo que perdemos en existencia.

Lo que en nuestros males nos hacen perder en materia de ser, lo ganamos en conciencia. El vacío que nuestras debilidades suscitan en nuestro ser es llenado por la presencia de la conciencia, ¿qué digo?, ese vacío es la conciencia misma.

***

***

Estando como estoy todo el año de vacaciones, cuando llegan las vacaciones propiamente dicha, se hace todavía más realidad el vacío en el que vivo: el de ahora es un vacío en segundo grado, un vacío del que uno es consciente en todo momento, el vacío oficial de mi existencia.

***

Esos momentos en los que se tienen unas ganas terribles de estar solo, porque estamos seguros de que, cara a cara con nosotros mismos, seremos capaces de encontrar y de expresar cosas extrañas, únicas, inauditas; y a continuación la decepción, tan grande como la esperanza, cuando uno se encuentra solo por fin y no sale nada de esa soledad tan esperada.

***

Nunca acabaré de descubrir defectos en aquellos que creía conocer a fondo.

***

Debería “elaborarse” una fórmula-tipo que cada cual pudiera decir en la hora de su muerte: “Me ha llegado la hora” o “Yo también debo morir”. La primera es demasiado vulgar, la segunda demasiado orgullosa.