CUENTOS PARA NIÑOS TRAVIESOS, Jacques Prévert

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JACQUES PRÉVERT, Cuentos para niños traviesos, Alfaguara, Madrid, 1984, 69 páginas.

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Las ilustraciones son de Elisa Henríquez, la traducción de Jacqueline Conte.
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EL AVESTRUZ
 
   Mientras Pulgarcito, abandonado en el bosque, sembraba piedrecitas para volver a encontrar su camino, no sospechaba que un avestruz le seguía y se iba tragando las piedrecitas una tras otra.
   Esta es la verdadera historia, así fue como ocurrió...
   El niño Pulgarcito se vuelve: ¡Ya no hay piedrecitas!
   Ya está definitivamente perdido, ya no hay piedrecitas, ya no hay regreso; ya no hay regreso, ya no hay casa; ya no hay casa, ya no hay ni papá ni mamá.
   «¡Qué pena!», dice para sí.
   De repente oye una risa, y luego un repique de campanas y el ruido de un torrente, trompetas, una verdadera orquesta, una tempestad de ruidos, una música brutal, extraña pero nada desagradable y totalmente nueva para él. Entonces se Úsoma por entre las hojas y ve al avestruz bailando, que le mira y deja de bailar y le dice:
   El avestruz:
   —Soy yo el que hace este ruido, soy feliz, tengo un estómago formidable, puedo comer cualquier cosa. Esta mañana, ya me he comido dos campanas con sus badajos, dos trompetas, tres docenas de hueveras, me he comido una ensalada con su ensaladera y las piedrecitas blancas que ibas sembrando   también me las he comido. Súbete encima de mí, corro muy deprisa, vamos a viajar juntos.
   —Pero —dice el niño Pulgarcito— ¿ya no volveré a ver a mi padre y a mi madre?
   El avestruz:
   —Si te han abandonado es que ya no tienen ganas de volverte a ver tan pronto.
   Pulgarcito:
   —Quizá haya algo de verdad en lo que dice, señora Avestruz.
   El avestruz:
   —No me llames señora, me da dolor de alas, llámame avestruz, sin más.
   Pulgarcito:
   —Bueno, de acuerdo, avestruz, pero aun y todo, ¿qué pasa con mi madre?
   El avestruz (furiosa):
   —¿Cómo qué? No me pongas nerviosa: además, para que te enteres, no me gusta mucho tu madre, con esa manía que tiene de ponerse siempre plumas de  avestruz en el sombrero...
   Pulgarcito:
   —La verdad es que cuesta caro, pero siempre hace gastos para deslumbrar a los vecinos.
   El avestruz:
  —Más le valdría ocuparse de ti, en, lugar de deslumbrar a los vecinos; a veces te pegaba buenas bofetadas...
  Pulgarcito:
   —Mi padre también me pegaba.
   El avestruz:
   —¡Ah! El séñor Pulgarcito también te pegaba, eso sí que es inadmisible. Si los niños no pegan a sus padres, ¿por qué los padres han  de pegar a sus hijos? Además, tampoco el senor Pulgarcito es demasiado listo. ¿Sabes lo qué dijo cuando vio el primer huevo de avestruz?
   Pulgarcito:
   —No.
   El avestruz:
   —Pues dijo: «¡Qué tortilla tan buena haría!»
   Pulgarcito (soñador):
   —Recuerdo que la primera vez que vio el mar, se quedó pensativo unos momentos y luego dijo: <¡Qué barreño tan grande, lástima que no haya puentes!» Todos se echaron a reír, pero yo tenía ganas de llorar, y entonces mi madre me dio un tirón de orejas y me dijo: «¡No te puedes reír como los demás cuando tu padre gasta una broma!» No tengo la culpa, pero no me gustan las bromas de los mayores...
   El avestruz:
   —A mí tampoco: súbete encima de mí, ya no volverás a ver a tus padres, pero al menos verás otras tierras.
   —Bueno —dice Pulgarcito, y se encarama en el avestruz.
   Al triple galope, el pájaro y el niño arrancan en medio de una gran nube de polvo. En el umbral de las casas, los campesinos menean la cabeza y dicen:
   —¡Otra vez uno de esos horribles automóviles!
   Pero las campesinas oyen al avestruz que repica al galopar.
   —Oís las campanas —dicen, mientras se santiguan- será una iglesia que se escapa, seguro que el diablo va corriendo detrás.
   Y todos se atrincheran hasta la mañana siguiente, pero a la mañana siguiente el avestruz y el niño están ya muy lejos.


1 comentarios en "CUENTOS PARA NIÑOS TRAVIESOS, Jacques Prévert"

  1. Nellla dice:

    Hola ! He leido este fragmento del cuento. Y te cuento, que este cuento lo encontré como un libro interesante que fue censurado en Argentina. Tengo un hijo pequeno que ya sabe leer y me encantaria conseguir este libro. Lo ando buscando por la net pero no lo encuentro. Sabes de como conseguirlo?
    Un abrazo y gracias por tu post